

Si estás leyendo estas líneas es que buscas acabar con el estrés, desconectar o simplemente dedicarte un momento porque te lo mereces.
También puede que te apetezca regalar salud y bienestar y en eso no podemos estar más de acuerdo. Nosotros creemos que es la mejor opción de regalo.
Por eso en nuestro clínica de fisioterapia uno de nuestros servicios estrella es sin duda el masaje relajante.
Zaragoza relax
Desde nuestros inicios hemos querido aportar relajación y bienestar a nuestros pacientes, por eso somos especialistas en varios tipos de masaje relajante en Zaragoza (más abajo te ayudamos a elegir).
Por si no nos conoces somos Jorge y Miren, fisioterapeutas en la Clínica de fisioterapia Herradón Villar, situada muy cerquita de Plaza San Franscico (Zaragoza).
Con este artículo queremos que nos conozcas y averigües qué masaje relajante es más adecuado para ti.
Beneficios del masaje relajante
Lo primero de todo queremos responder a una de las preguntas más frecuentas que nos encontramos en la clínica:
¿Por qué un masaje relajante es un tratamiento antiestrés?
El estrés es una causa frecuente en la aparición o empeoramiento de algunas enfermedades o problemas de bienestar. Los masajes de relajación son una forma más de cuidarse a si mismo . La salud y el relax están fuertemente ligados.
¿Qué efectos fisiológicos ofrece un masaje relajante?
- Estimulan la circulación, ya que al relajarte tu respiración es más profunda y el cuerpo bombea más oxígeno llenando tus pulmones al máximo.
- Relaja y suaviza los músculos lesionados y sobrecargados. Esto es especialmente importante para pacientes que han sufrido lesiones deportivas. También ayuda a eliminar dolores derivados de la práctica deportiva y se reduce el tiempo de recuperación de entrenamientos fatigosos.
- Ayudan a reducir espasmos musculares y calambres.
- Los masajes relajantes también ayudan a disminuir tensiones cervicales.
- Alivian el dolor de quienes padecen migrañas y dolores de cabeza intensos.
¿Qué tipo de masaje relajante elegir?
Esto dependerá de las necesidades del paciente, pero a continuación te explicamos las diferencias de nuestros masajes de relajación.
- Masaje clásico: es un masaje con aceite que se adapta en intensidad y presión a lo que cada persona necesita. Se puede realizar en espalda, cervicales, brazos y/o piernas. Ideal si no sabes por cuál decidirte.
- Masaje craneofacial: este masaje incide en la musculatura cervical y craneal, se aplican maniobras de masoterapia muy activas y drenantes que mejoran la circulación sanguínea del rostro y consiguen un efecto de piel más luminosa, descansada y reafirmada. Ideal si tienes dolores de cabeza o cervicales.
- Masaje stretching: este masaje combina estiramientos pasivos, masoterapia y movilizaciones articulares, alivia los problemas ocasionados por la fatiga en el entrenamiento por lo que es el complemento ideal para los deportistas.
- Masaje tailandés: lo realizamos mediante presiones de pies a cabeza en el que se cambia la posición del cuerpo para realizar estiramientos y tracciones.
- Masaje 4 manos: este masaje es realizado por 2 fisioterapeutas sincronizados en la técnica manual. Se masajea simultáneamente piernas, espalda, cuello, brazos, cara y cabeza. El más completo para aliviar todas las tensiones del cuerpo.
- Drenaje linfático: no es un masaje relajante como tal pero estas sesiones están indicadas para evitar la retención de líquidos, mejorando así la circulación y la celulitis. En ocasiones, son ideales para el periodo de embarazo.
Puedes echar un vistazo en nuestra tienda online.
Todos estos masajes también están disponibles para regalo. Si tienes dudas acerca de qué masaje relajante regalar (a ti o a otra persona) puedes escribirnos sin compromiso.
Conclusión sobre los masajes relajantes
El masaje relajante es el tratamiento ideal si tienes tensión acumulada y relacionada con el estrés.
El objetivo es olvidarnos de esta tensión profundizando en la sensación de bienestar que nos aportan los mismos. Aumentar la sensación de placer, calma y relax en nuestro cuerpo es altamente beneficioso.
¡Hasta el próximo artículo!